El alumnado de 2º de ESO ha escrito para la ocasión cuentos de terror, misterio...os dejamos unas muestras para entretener los días...
Un Halloween Sangriento
Érase una vez un 31 de octubre normal como todos los días de Halloween. Pero esta vez iba a ser un poco diferente. Era una mañana de viernes y un chico llamado Marcos estaba desayunando en su casa, a Marcos no le gustaba Halloween porque le daban mucho miedo las cosas de terror.
Llegó al colegio y se juntó con sus amigos Óscar y Pedro, antes de que empezara la clase Óscar le propuso un reto a sus queridos amigos: “Os reto a entrar al cementerio de las afueras de la ciudad esta noche que es Halloween”.
Marcos como no quería quedar mal delante de sus amigos aceptó el reto al igual que Pedro.
Llegó la noche y Marcos se presentó al cementerio junto con Óscar y Pedro. Óscar dijo a sus amigos: “El reto consiste en que cada uno tiene un vaso y en el final del cementerio hay otros tres, tenéis que vaciarlos y volver y el que no lo haga tendrá que dormir aquí una noche”. Todos estuvieron de acuerdo pero no tenían ni idea de lo que se iban a encontrar.
Primero fue Óscar que era el más valiente de todos y fue riéndose porque pensaba que no iba a pasar nada, mientras le esperaban fuera Marcos y Pedro. Cuando pasó un rato vieron que Óscar no volvía y fue Pedro a buscarlo, Marcos se quedó muerto de miedo solo en la entrada del cementerio.
Pasó otro buen rato y ni Óscar ni Pedro volvieron, entonces, Marcos se armó de valor y fue a buscar a sus amigos para salvarles la vida (Si seguían vivos). Al entrar notó que el ambiente cambió por completo y ya no veía la entrada del cementerio, cuando llegó a la zona de los vasos vio que estaban llenos, pero no de agua.
Cuando vio el interior del vaso se le paralizó el rostro. Estaba lleno de… ¡Sangre! Cuando se giró para intentar correr vio en dos árboles colgados y descuartizados los cadáveres de Óscar y Pedro goteando sangre.
Marcos no sabía que hacer, pero en ese momento, notó que alguien le tocó la espalda y cuando se giro… era el cadáver putrefacto de un muerto viviente que mataba a todo el que pasase por allí. Inmediatamente Marcos salió corriendo del cementerio con todas sus fuerzas y cuando le contó todo a su madre y a la policía no le creyeron.
Marcos fue al cementerio con la policía para demostrar que era verdad, pero ya no estaban los cuerpos. Mientras la policía se iba, Marcos se quedó pensando y de repente alguien le agarró por detrás. Cuando la policía se giró Marcos ya no estaba, lo buscaron durante días pero no encontraron ningún rastro de él, cerraron el cementerio y desde ese día nadie supo más sobre Marcos, Óscar y Pedro. Sus madres siguen buscándolos con esperanzas de encontrarlos, pero lo que no saben es que ya no están entre los vivos y sus espíritus vagan por el cementerio en busca de venganza para descansar en paz.
Fin
Samuel Real Chía, 2º ESO B
LA REENCARNACIÓN DE MARÍA
Era de noche, me encontraba en una
oscura calle en el centro de Jerez de la Frontera, más concretamente en la
calle Francos. Apenas se veía con la luz de las farolas, hacía frío y tenía
miedo. Estaba solo, ni siquiera había un gato, no sabía a dónde ir, ni qué
hacer así que salí corriendo. Cuando me di cuenta, estaba totalmente perdido y
para mi asombro, escuché algo que venía de una casa, así que entré.
Dentro de ese hogar olía mal y la
humedad era excesiva, cuando empecé a moverme el parquet del suelo crujía y… El
suelo se deshizo y caí a una especie de
sótano en el cual no noté la presencia de pavimento bajo mis pies, solo había
agua. No sé qué profundidad tendría pero estoy seguro de que venía de las
alcantarillas de la ciudad, cogí aire y me sumergí, no conseguí ver nada ya que
el agua estaba muy oscura y no había luz.
De pronto noté como algo o alguien me
agarraba una pierna, pero me soltó, encontré unas escaleras por las que salí de
ese apestoso estanque, corrí y salí a la calle y me encontré con una agradable
monja la cual me acompañó al convento de Sta. María la Reparadora en la calle
Chancillería. Allí pude lavarme y comer algo y después la misma hermana que me
encontró me acompañó a la calle. Yo era nuevo en la ciudad así que no supe a
dónde ir, anduve un rato y llegué a la calle Justicia, como seguía sin saber
sin saber dónde me encontraba seguí andando hasta que encontré una iglesia, la
de San Lucas si no recuerdo mal. La puerta estaba abierta y entré, aquello
ocurrió en torno a las 2:30 de la madrugada, allí, en la iglesia, me fijé en
las imágenes y cuando llegué a la Virgen… Tenía la misma cara que la monja que
me ayudó, no lo podía creer, era ella…
Juan Antonio Tamayo Herrer 2º D
La Casa Encantada
Había una vez una familia que vivía en una
mansión en medio del bosque. Dónde está la mansión, había un cementerio
antiguamente. El 31 de octubre era el cumpleaños de la hermana pequeña de esa
familia. La niña iba a hacer una fiesta de cumpleaños en su casa, pero nadie
quería ir porque decían que su casa estaba encantada, así que, solo se reunió
con su familia. Su bisabuela le regaló una muñeca de porcelana con dos trenzas
de cuando ella era pequeña. Le contó que antes de que se la diera empezó a
hablar sola y a moverse, por eso se la regaló. Ese día había muchos niños
pidiendo caramelos, pero a esa casa solo se atrevían a ir unos pocos. Cuando su
bisabuela le contó lo que le pasaba a la muñeca, decidió guardarla en una caja
de su armario. Cuando ya estaba dormida escuchaba ruidos extraños y a alguna
persona hablar, cuando todas las personas de la casa estaban dormidas, a pesar
de todos los ruidos siguió durmiendo. A la mañana siguiente se levantó y fue a
mirar a la caja donde puso su muñeca por si esta había sido la causante de los
ruidos que escuchaba. Cuando fue a mirar y vio que la muñeca no estaba allí se
quedó asombrada y corriendo fue a contárselo a sus padres. Sus padres no la
creyeron y llamó a su bisabuela por teléfono para ver si ella la creía. Mientras
que la estaba llamando, la muñeca apareció en la cocina al lado de un cuchillo.
Su bisabuela le creyó porque algo parecido le pasó a ella. Se lo contó a los
padres de la niña y a ella sí la creyeron y decidieron que lo mejor sería tirar
la muñeca.
La hermana de la niña todas las noches
escuchaba pasos y voces susurrándole a su oído que decían " Llevamos aquí
muchos años pero nunca nos hemos hecho saber hasta ahora". Algunas mañanas
el fregadero se abría solo el grifo, las tostadas salían solas de la tostadora,
se encendía y se apagaba sola la luz…. Pasaban cosas de ese tipo a menudo por
eso decidieron poner en venta la casa y mudarse lejos de esa. Encontraron un
comprador. Una vez ya hecho todo, incluida la mudanza, los que compraron la
casa ya vivían allí. Ellos vieron la silueta de una persona y en ese mismo
momento se cerraron todas las puertas y ventanas con pestillo. Y desde entonces
no se supo nada más de esa familia.
Claudia Pulido 2º B
TRAICIÓN
Eran las
7:20 a.m, cuando sonó la alarma y
Virginia se levantó de la cama como de costumbre para ir al instituto.
Bajó a la
cocina a por algo para desayunar, cuando Eva su amiga le manda un mensaje
diciéndole que hoy iba a ir un chico nuevo al instituto.
Ella no la
tomó muy en cuenta y cuando terminó de desayunar se fue.
¡Qué
casualidad que el chico nuevo cayera en su clase!
Cuando
Virginia lo vio a él, se le iluminaron los ojos y puso una sonrisa tímida. Eva
como siempre se sentó al lado de ella.
-Buenos días
alumnos, hoy tenemos con nosotros un nuevo compañero, preséntate- le dijo la
profesora
-Hola, me
llamo Lucas y vengo desde un centro en Estados Unidos- dijo él
-¡Qué guapo
es!¡ Y además tiene cara de ser un chico intelectual y estudiante, como a mí me
gustan!- dijo Eva susurrando
Virginia
pensó lo mismo, pero se percató de que a su amiga también le gustaba y eso le
dio un poco de coraje.
Sonó el
timbre del recreo y Lucas se sentó solo en un banco porque no conocía a nadie,
hasta que se acercó Eva y se sentó junto a él. Ella se presentó y estuvieron
hablando durante todo el tiempo hasta que volvió a sonar el timbre para
regresar a clase. Ellos se levantaron y se fueron juntos al aula.
Virginia
desde otro banco los miraba llena de envidia y enojo porque no quería que Eva
le quitase a Lucas. Aun así también se puso en pie y se dirigió hacia el aula.
Cuando se
sentó y la otra le empezó a contar todo de lo que habían estado hablando, se
envenenó mucho más, hasta que no se pudo contener más y explotó.
Tuvieron una
pelea muy fuerte y dejaron de hablarse.
Pasó un día,
otro, otro y otro, Virginia ya no podía aguantar más ver a Eva con Lucas, para
intentar vengarse porque estaba llena de resentimiento e ideó un plan.
31 de
Octubre, Halloween, aprovechó que el delegado de la clase organizaba una fiesta
donde todo el mundo iba a estar disfrazado, para cometer un crimen.
Eva estaba
allí cogiendo algo de beber, cuando apareció Virginia y la llamó desde lejos
haciéndole señales con las manos para que fuera. Cuando llegó allí, Virginia le
dijo que era mejor que hablaran en una habitación porque no escuchaban con el
ruido.
Entraron y
de repente sacó un cuchillo, Eva se asustó muchísimo, pero ella empezó a
cantar:
-¡Junta
mantequilla, pan con nocilla…..!¡Es una broma!¡Feliz Halloween!- exclamó
Virginia para intentar reconciliarse con ella.
A Eva le
empezó a entrar un ataque de risa y al echarse hacia atrás se resbaló, se cayó
para atrás y se dio en la cabeza accidentalmente con el mueble.
Virginia
asustada y aterrorizada empezó a gritar:
-¡Socorro!¡Socorro!¡Ayúdenme!
De repente
empezó a llenarse el cuarto de gente y llamaron a la ambulancia.
Ella
intentaba explicar y excusarse sobre lo que había ocurrido con lágrimas en sus
ojos, porque aunque le gustase el mismo chico, al fin y al cabo, era su amiga.
Pero cuando
llegó la ambulancia ya era demasiado tarde.
Virginia
aprendió que las malas intenciones pueden tener consecuencias y tras
declaraciones a la policía se aclaró todo, pero ella quedó muy afectada y
necesitó ayuda psicólogo para superarlo.
FIN
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