“La libertad,
Sancho, es uno de lo más preciosos dones que a los hombres dieron los cielos;
con ella no pueden igualarse los tesoros que encierra la tierra ni el mar
encubre; por la libertad, así como por la honra, se puede y debe aventurar la
vida”
HOY VAMOS A
ENTREVISTAR AL MÁS FAMOSO E ILUSTRE DE
TODOS LOS CABALLEROS ANDANTES QUE HAN
PODIDO EXISTIR HASTA NUESTROS DÍAS, DON QUIJOTE DE LA MANCHA.
ENTREVISTADOR- Hola, buenas tardes Don Quijote de
la Mancha, no le importaría contestar a unas preguntas para un trabajo de clase
de Lengua y Literatura.
DON QUIJOTE- Vale, pero no me
entretenga más de lo debido que tengo que seguir mi camino, que la gloria me
espera, el mundo está lleno de peligros,
gigantes como molinos de grande y doncellas en apuros. Cada día muchacho
es una aventura nueva.
ENTREVISTADOR-
¿Qué te ocurrió con el Caballero de la Luna Blanca?
DON
QUIJOTE- Pues que me retó en duelo por la belleza de su amada,
él decía que su amada era más bella que mí Dulcinea, y entonces no me quedó otra que aceptar, la condición que me puso fue
que si él ganaba quedaba a mí disposición su cabeza, sus armas y su caballo
pero si perdía tendría que volver a mi hogar durante un año sin coger las armas
viviendo una vida tranquila, el caso es que finalmente él me ganó y se llevo mi
gloria y hazañas, ¡vamos muchacho, toda una desdicha!
ENTREVISTADOR- ¿Cuál es su nombre de pila?
DON QUIJOTE- Mí nombre es Alonso Quijano el Bueno, más
conocido por mi nombre de caballero Don Quijote de la Mancha.
ENTREVISTADOR-¿Qué le pasó con Altisidora?
DON QUIJOTE- Altisidora es una doncella de la duquesa y
es de muy buen ver, se enamoró de mí y por un momento flaqueé, pero de momento
volví en mí, mi corazón pertenece a una sola mujer y esa es Dulcinea del
Toboso.
ENTREVISTADOR- ¿Qué paso al final con la batalla
del lacayo Tosilos?
DON QUIJOTE- Pues que después de retarlo en combate para
defender el buen nombre de la muchacha, el mozo paró el duelo, porque le dijo
que se casaría con ella, pero cuando se quióo la armadura vieron que era el
lacayo del duque y empezaron a decir que era un engaño, pero no era un engaño
sino que los hechiceros que me persiguen no dejaron que yo consiguiera la
gloria del combate le cambiaron la cara al mozo por la del lacayo, lo
encerraron durante quince días para ver si volvía su estado de antes, pero, aun
así, la muchacha aceptó, decía que prefería ser la mujer de un lacayo que la amante de un caballero y de
esta manera mi duelo finalizó.
ENTREVISTADOR- ¿Qué le paso en el castillo de los
Duques concretamente en su aposento con unos gatos?
DON
QUIJOTE- Muchacho, ¡no te equivoques! no eran simples
gatos. Te cuento, yo estaba recitando
una canción romántica compuesta por mí, cuando se escuchó un ruido tan
grande que me sobresalté, eran demonios hechiceros, cogí mi espada y empecé a
luchar contra ellos, pero me dejaron la
nariz y la cara mal parada; no pude acabar la lucha con ese hechicero infernal.
ENTREVISTADOR- ¿Por qué es un requisito fundamental
para ser caballero andante tener una dama a la que amar?
DON
QUIJOTE- Porque el caballero andante sin amores es un
árbol sin hojas y sin frutos, y cuerpo sin alma; no tendría sentido. Además el
tener una dama a la que amar y a la que comendarse es condición imprescindible para ser
considerado un auténtico caballero. Mi amada es Dulcinea del Toboso, es la que
tiene cautivo mi corazón, seré leal a ella hasta el fin de mis días.
ENTREVISTADOR-
¿Cual fue el seudónimo que le puso Sancho al ver a esos fantasmas?
DON
QUIJOTE- JAJAJAJA… me llamo “el Caballero de la Triste
Figura”
ENTREVISTADOR- ¿Cuándo viste tú y tu compañero
Sancho por primera vez la playa?
DON
QUIJOTE- Cuando llegamos a Barcelona, ahí fue donde vi
por primera vez el mar con Sancho, fue el día de San Juan y estaba en Barcelona
porque se celebraban unas justas.
ENTREVISTADOR-¿Qué sucedió con la hija de Ricote?
DON
QUIJOTE- Eso es una
historia muy conmovedora, atraparon la embarcación morisca y había una joven
chica cristiana disfrazada de hombre, el virrey subió a dar la enhorabuena por
la captura, cuando descubrieron que era una mujer le pidieron que se explicara
y ella contó, que la desterraron, que la dejaron a cargo de unos familiares y
que se enamoró de un caballero llamado Gaspar, que llegaron a un territorio de
turcos, que allí Gaspar tuvo que vestirse de mujer y que el rey lo dejó allí
para regalarlo al gran sultán, y a la
chica la mandó a por el tesoro que
su padre escondió en España. Una trágica
historia pero con final feliz, el virrey que era compasivo dijo que rescataría
a su amado, se reencontró con su padre Ricote. Y yo me ofrecí a ir al rescate
de Gaspar pero no me dejaron.
ENTREVISTADOR- ¿Qué te parece lo que relata en el
segundo libro sobre ti y tu compañero escudero Sancho cuyo autor es Avellaneda?
DON
QUIJOTE- Que está lejos
de la realidad y de la verdad, lo poco que leí había cambiado el nombre de la
mujer de Sancho por otro diferente, ponía a Sancho de glotón, borracho nada
gracioso y simplón, y de mí que me he desenamorado de Dulcinea del Toboso
cuando eso es una majadería y es totalmente falso. A mí no me importa que me retrate quien
quiera, pero siempre con la verdad.
Al igual que espero muchacho, que
esta entrevista no se aleje de la verdad de mis relatos.
ENTREVISTADOR- Muchas gracias por haberme atendido
es todo un privilegio haberle entrevistado; es, sin duda el, mejor caballero
andante de todos los tiempos.
DON QUIJOTE- El gusto es mío muchacho y deseo que saques
un sobresaliente en tu trabajo de Lengua y Literatura.
Si no hay más nada que preguntar ni decir,
sigo mi camino, hasta luego muchacho.
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